En 1994, Minetaro Mochizuki comenzó a serializar la que sería su obra más reconocida: Dragon Head. Este “seinen” (término utilizado para referir a audiencias de jóvenes adultos) realiza un estudio del terror psicológico. El manga contó con una longevidad de 83 números publicados hasta el año 2000 en el semanario Young Magazine de la editorial Ködansha.
Su trabajo le valió el premio en la categoría “General” del Premio Manga de Ködansha en 1997. Al finalizar la obra, en el año 2000 ganó en la categoría “Premio por excelencia” entregado en la cuarta edición del Premio Cultural Osamu Tezuka. Posteriormente, recopiló en diez tomos “Tanköbon” (“volumen compilatorio”) y supo abrirse paso hasta llegar inclusive al cine.